acabo de despertar. anoche tuve una conversa linda, especial. estuvimos en un bar simpático y con música más o menos decente. creo que en fondo desearía administrar un local así: un sitio tranquilo, a media luz, con buenos vídeos y bebedores tranquis, que no armen bronca. .. decía que anoche me sentí especial porque me gusta charlar con ella. lo disfruto mucho; especialmente cuando suelta esa risita de recepcionista del ministerio del interior que de vez en cuando se maneja. de repente no soy tan aburrido como dicen. cómo será... anoche ella medio que se mareó, a pesar que a las justas íbamos en tres botellas. por ahí tenemos guardada una botella de vino; ya es tiempo de evaporarla...
hoy tuve una mañana pesada. fui a ver otros lugares donde estudiar (mi vieja quiere que estudie computación, diseño, esas cojudeces) y me encontré con gente que no veía hace años. me miraron como si no me conocieran. en realidad nadie me reconoció. será que tanto he cambiado... anoche me di una ducha bravaza y hoy he amanecido medio resfriado, de frío, pero con sed. sacaré de nuevo las chompas del closet porque acá en villa maría corren ya los fuertes vientos de siempre... quiero ir al cine (ojalá estén dando algo decente). el otro día fui y estaban dando una película que tenía a un perro de protagonista (¿?) ... anoche -dice mi vieja- llegaron mis patas a verme y como no estaba dejaron dicho que dónde ando, que ya no me dejo ver como antes, que con quién andaré y otras cojudeces más. mi vieja les djo que ella también se pregunta lo mismo, que se vayan, que vuelvan otro día... bueno, me voy a a almorzar. un reventado de cangrejo me sonríe humeante desde la mesa. vuelvo más tarde...
qué chu... me habrás querido decir, causa, no sé, pero porsisca LA TUYA!!
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